Las lágrimas no me harán desistir
La vida entera está por conquistar
martes, 27 de agosto de 2013
sábado, 24 de agosto de 2013
martes, 20 de agosto de 2013
a la luna llena
Se sienta en la acera,
mirando el cielo fijamente,
gana cordura
y a cada segundo el sol le da tanto miedo, que se esconde,
renuncia de libros santos, de las palabras y las promesas.
Regala sus ojos a alguna estrella,
esperando que alguna se la devuelva
Se duerme durmiendo sin él,
donde los sueños le acompañan,
se carga el tiempo a la deriva que se caga en Dios por
llevarse su esperanza,
con palabras benditas del de negro algún consuelo,
María se busca en el espejo que queda de aquel amor.
Lleva los días a cuestas
y esa ausencia que tanto le llena,
se pasa las noches en vela y que su amor,
se lo devuelva la luna llena.
Y cada día que pasa deja de respirar, un poco más,
la cuesta arriba que tanto le pesa,
sus almohadas son las aceras,
buscando respuestas, preguntándole a la luna llena.
domingo, 18 de agosto de 2013
miércoles, 7 de agosto de 2013
martes, 6 de agosto de 2013
Celebración de la sonrisa
A veces
por supuesto
usted sonríe
y no importa lo linda
o lo fea
lo vieja
o lo joven
lo mucho
o lo poco
que usted realmente
sea
sonríe
cual si fuese
una revelación
y su sonrisa anula
todas las anteriores
caducan al instante
sus rostros como máscaras
sus ojos duros
frágiles
como espejos en óvalo
su boca de morder
su mentón de capricho
sus pómulos fragantes
sus párpados
su miedo
sonríe
y usted nace
asume el mundo
mira
sin mirar
indefensa
desnuda
transparente
y a lo mejor
si la sonrisa viene
de muy
de muy adentro
usted puede llorar
sencillamente
sin desgarrarse
sin deseperarse
sin convocar la muerte
ni sentirse vacía
llorar
sólo llorar
entonces su sonrisa
si todavia existe
se vuelve un arco iris.
M. Benedetti- Arco iris
por supuesto
usted sonríe
y no importa lo linda
o lo fea
lo vieja
o lo joven
lo mucho
o lo poco
que usted realmente
sea
sonríe
cual si fuese
una revelación
y su sonrisa anula
todas las anteriores
caducan al instante
sus rostros como máscaras
sus ojos duros
frágiles
como espejos en óvalo
su boca de morder
su mentón de capricho
sus pómulos fragantes
sus párpados
su miedo
sonríe
y usted nace
asume el mundo
mira
sin mirar
indefensa
desnuda
transparente
y a lo mejor
si la sonrisa viene
de muy
de muy adentro
usted puede llorar
sencillamente
sin desgarrarse
sin deseperarse
sin convocar la muerte
ni sentirse vacía
llorar
sólo llorar
entonces su sonrisa
si todavia existe
se vuelve un arco iris.
M. Benedetti- Arco iris
Suscribirse a:
Entradas (Atom)